Con el verano nos tira siempre comer postre refrescantes, como helados, postres sin cocción, postres con frutas, etc. y hace tiempo que quería preparar una cheesecake de fresas y eso de tener varias capas a mi me daba la impresión de que sería complicado.
Pues nada que ver! estoy super contenta de poder hacer este postre y que es fácil de preparar, bueno... fácil no, lo siguiente y sale exquisito, si piensas guardarlo, eso no dura ni 24h. en la nevera, te lo juro!
Hay mil maneras de preparar y variedades y sabores que ya te dejo experimentar por ti mism@.
La foto no es la mejor, pero tampoco es que salga muy bien, i pero la cocina con mesada negra y poco luminosa, pues nada, esto es lo mejorcito que ha salido, lo siento. Lo importante es que está muy buena.
Con la explicación de la preparación parece que es complicado, pero no, son los pasos y luego ya lo haces de memoria.
Vamos a necesitar si o sí, un molde desmontable especial para tartas así como este:
Ingredientes:
1 Sobre de gelatina sabor fresa
1 cartón de nata para montar de 200 ml
1 paquete de queso untable tipo Philadelphia
1 paquete de galletas tipo maría
100 g de mantequilla derretida
Mermelada de fresas, cantidad necesaria para la cobertura (4 cucharadas colmadas aprox.)
Fresas frescas para decorar (opcional)
Preparación:
En una bolsita pequeña que tengas por ahí metemos las galletas María, la bolsita de la de la farmacia, o de bocadillos que no sea tan grande como la de Mercadona y si no, pues usa la que tengas, todo vale.
Y pasamos el rodillo y amasamos las galletas así como están, vamos acomodando dentro de la bolsa que se desparraman y seguimos amasamos constantemente. La idea es que se vayan moliendo hasta que llegue a transformarse en casi polvo, si quedan pedacitos pequeños tampoco pasa nada, sale más crujiente al morder. Lo ideal es hacerlo con una picadora, es menos laborioso.
Una vez todo hecho migas pequeñitas o casi polvo de galletas, colocamos en un bol y le añadimos la mantequilla derretida y ayudándonos con un tenedor, mezclamos para que se empape bien la mezcla de galletas con la mantequilla.
En una olla o cazo, volcamos el sobre de gelatina de fresas, sobre la misma añadimos el contenido de un cartón de nata para montar que vienen de 200 ml. y con ayuda de un batidor a mano vamos removiendo y mezclando bien hasta que el azúcar de la gelatina ya no se perciba y quede todo bien integrado, SIN LLEGAR A HERVIR! Por si acaso, si tienes vitrocerámica, lo pongo en 4/5, no lo pongo en calor máximo. Si es a gas, en mínimo, la idea es que quede calentita pero que no hierva.
Retiramos del fuego y añadimos el paquete del queso Philadelphia o de otra marca (yo utilicé el del Día que cuesta 0,90€) y con el batidor mezclamos bien hasta que también quede como una mezcla uniforme.
Sacamos el molde con la base ya fría y ahora, incorporamos la mezcla de quesos y gelatina sobre la misma. Llevamos al congelador un par de horas (para acelerar el proceso de enfriado que sino, tarda muchas horas) y luego lo bajamos a la nevera un par de horas más.
Para darte cuenta que ya ha solidificado el relleno, con meter un cuchillo te das cuenta, que está sólido en su punto.
Antes de servir, añadimos la mermelada de fresas por encima como una cobertura y si quieres también puedes ponerle trozos de fresas por encima, queda más refrescante.. Y listo! a devorar, te va a encantar!
*Si la preparas con gelatina neutra, añade 6 cucharadas de azúcar!, con el sobre de gelatina no hace falta que ya tiene bastante azúcar, no le va a faltar, te lo aseguro*
Puedes hacer el relleno con Gelatina Neutra y añadir ralladura de limón, y hacer la cheesecake de limón, y agregar el topping con mermelada de limón, naranjas, albaricoque, etc. lo que sea, para variar.
Otra opción es añadir nueces y de topping con dulce de leche, ya ven que da mucho juego.
Espero que les guste! Ñam Ñam!😍😍
